La cantautora chilena Nacha Nava presenta el nuevo adelanto de su disco: Como fueron las cosas, una profunda y honesta canción que aborda el final de una relación desde una mirada madura, serena y esperanzadora. Sintiendo que el tema del despecho en los términos de relaciones, la artista decide probar una arista diferente y bastante cotidiana también. «A veces las relaciones van muriendo en el tiempo y de repente te das cuenta que las cosas ya no son como fueron. Ahí el amor se transforma y uno deja ir al otro desde la tranquilidad de que no hay más que dar… se suelte desde la paz”, relata Nacha.
El tema nos adentra en su próximo álbum Encuentro Onírico, una obra compuesta por ocho canciones, grabada en Buenos Aires, Argentina, bajo la producción del reconocido músico y productor Guido Nisenson.
Fiel a su estilo pop rock cargado de sensibilidad, Nacha Nava nos invita a mirar de frente esas historias que alguna vez fueron importantes y que, sin dramatismo ni reproches, deben soltar sus últimas palabras. Como fueron las cosas es una reflexión íntima sobre los cierres, y un homenaje al valor de aceptar que el amor, a veces, simplemente toma otros caminos.
Con una producción sobria pero contundente, la canción equilibra la melancolía con una energía luminosa que acompaña la transición emocional de quien deja ir, no desde el rencor, sino desde el cariño. La voz de Nacha se despliega íntima y directa, conectando con quienes han vivido procesos similares y encuentran en la música una forma de sanar.
“Es una canción sobre aceptar la verdad de lo vivido, reconocer que las cosas cambiaron y que la vida sigue su curso. Y que está bien que cada uno tome su camino, incluso con nuevas personas”, comenta la artista.
Como fueron las cosas ya está disponible en todas las plataformas digitales. Con este nuevo lanzamiento, Nacha Nava reafirma su lugar dentro del panorama musical chileno e hispanoamericano, consolidando una propuesta artística sincera, emocional y profundamente humana. Su nuevo disco, Encuentro Onírico, promete ser un viaje sonoro hacia la introspección, lo real y lo soñado.